Posteado por: admin | 5 junio, 2012

Comer sin pesticidas: ¿es posible?

Según una investigación de Greenpeace en Alemania, más del 80% de las frutas y 55% de las verduras contienen residuos de pesticidas. Sobre todo se ven afectadas frutas y hortalizas importadas de fuera de la UE.

Greenpeace Alemania analizó frutas y verduras tanto producidas en Alemania como importadas de todo el mundo. Los resultados son bastante preocupantes. En consecuencia se plantea la pregunta: ¿qué comer?
frutas, verduras, pesticidas, resíduos

El estudio revela, por ejemplo, que la pimienta, peras y uvas importadas de Turquía son productos de riesgo, con altas concentraciones de residuos de plaguicidas. Las muestras de frutas y verduras procedentes de India superaron en un 40% el nivel permitido de residuos de plaguicidas, y las de Tailandia en un 30%. Incluso las frutas y verduras importadas de los EE.UU. superaron las normas europeas entre un 12 y un 21%.

Sin embargo, aunque la legislación establece el nivel máximo de residuos, no tiene en cuenta los peligros derivados de la acumulación de varios plaguicidas en un mismo producto, aunque estén en niveles bajos. La acumulación de varias sustancias tóxicas en el cuerpo es especialmente perjudicial, y la mayoría de ellas permanecen en nuestros cuerpos por periodos muy largos, pudiendo ocasionar graves enfermedades e incluso cáncer. Por ejemplo, en las fresas belgas podemos encontrar acumulados hasta siete pesticidas diferentes. Y las grosellas alemanas pueden tener hasta diecisiete pesticidas diferentes.

Los productos ecológicos están mucho menos contaminados, ya que se cultivan sin utilizar pesticidas. Su nivel de residuos por lo general es muy bajo, y aunque no han sido tratados con pesticidas, pueden haber sido ligeramente contaminados por las aguas subterráneas o por el viento, desde los cultivos circundantes que sí utilizan estas sustancias. Sin embargo, son productos mucho más sanos y menos contaminados.

Así que nos preguntamos de nuevo, ¿qué comer? ¿Y cómo podemos protegernos?

Como ya se dijo, por ahora, los productos orgánicos siguen siendo la opción más segura. No obstante, son más caros debido a la menor producción y también al trabajo más extenso para cultivar los productos.

Greenpeace también recomienda mirar las etiquetas y el país de origen, evitando las verduras y frutas procedentes de países afectados. También se recomienda lavar las frutas y las verduras antes de consumirlas, y siempre que sea posible, pelarlas, ya que la mayoría de los residuos de pesticidas se encuentran en la cáscara.

Fuente: Greenpeace

Escrito por Nadia El Bennich


Deja un comentario

Categorías